martes, 8 de mayo de 2012

Se escribe imprescindible, pero se pronuncia Edgar

La vida es rara. Y por qué negarlo, somos raros. Hoy pensamos de un modo, pero ayer era todo lo contrario. Más aun... probablemente, mañana haya dado un giro de 180º que nos lleve a tirar por tierra todo tal y como lo veíamos hasta ahora. Los sentimientos cambian y las relaciones evolucionan. Las personas pasan por nuestra vida, a saber por qué razón... y el tiempo, el tiempo se esfuma. Y lo perdemos. Dejamos pasar las oportunidades como si en cualquier momento fueran a retroceder en su marcha para volvernos a buscar. No pensamos, solo actuamos. Y cuando pensamos demasiado, no llegamos a tiempo para actuar. El mundo está loco, y nos lleva con él. Ahora creemos saber lo que queremos y a quien, pero en unas horas la vida se nos habrá caído encima, pesando tanto que solo querremos ponernos unos cascos que nos aíslen de la realidad y acurrucarnos bajo el edredón, creyendo que estamos a salvo. Somos así, tan fuertes y frágiles al mismo tiempo, que pueden tumbarnos con una palabra y matarnos con una mirada. Las cosas que no decimos, pasan a no existir, y las que decimos y no pensamos, a desatar una guerra. Sentimos tanto que podemos rompernos en mil pedazos y físicamente, quedar intactos.  
Y yo soy rara, cambio de opinión todo el tiempo, de gusto y de parecer, dejo pasar el tiempo sin darme cuenta, actúo, luego existo. Mato con palabras y me matan con miradas, soy frágil, me hago la fuerte  y me rompo cada dos por tres. Pero lo único, que no asumo ni estoy dispuesta a aceptar es que tú, te des por vencido y que no creas tan ciegamente como yo, en que lo que nos va, es caminar siempre al revés, que tu mirada me hace grande y que lo nuestro es tan genial que nadie puede decir que lo entiende, porque no es así. Que me pregunto si soy feliz, y es porque te tengo a tí. Que te necesito. Y que no me importa repetirlo cuantas veces sea necesario, ni mucho menos, demostrártelo. Que en mi diccionario se escribe imprescindible, pero se pronuncia Edgar.

1 comentario:

  1. Qué bonito!! Ese tal Edgar debería estar súper orgulloso de tenerte, y que no te deje escapar! :)

    Un besote!

    ResponderEliminar