martes, 18 de agosto de 2009

AMARGADA

Cuanto más lo pienso, más me amargo, y cuanto más me amargo, más pena me doy.
Lo peor de todo, es que nadie parece entenderme, y quien quizás lo haría un poquito, no tiene tiempo de preocuparse. Pero llega a darme igual. Me da, y no me da.
Me doy cuenta de que yo sola me alejo de algunas cosas, y de que yo sola, hago que se alejen de mí por otras. De que yo sola me lo digo todo, y de que yo sola creo todo esto.
Pero qué voy a hacer, si ni yo tengo ganas de escucharme.
Parece como si todo lo que hago esté mal, como si todas mis intenciones son egoístas, como si todo lo que quiero fuera por interés, como si todo lo que me ilusiona sea por ambición.
Parece que todo sea más que negro, y sé que mañana probablemente vuelva a cambiar de color, pero ayer, y hoy, y la mayor parte del tiempo, voy sola tras unos pasos gigantes que no llego a alcanzar de ninguna de las maneras. Esos pasos gigantes, ese control, ese poder ejercido sobre mí. Mis padres. Que no sopòrto, que cada vez es menos. Y lo intento, pèro no sé como aguantar que por su culpa, y toda su culpa, no haya podido tener el verano que quería, que no haya ido a la playa con mis amigas, ni a las fiestas de Teruel, ni a las de Huesca, ni al pueblo de ninguna amiga, ni a San Juan, NI A NINGUNA PARTE! porque lugar al que me invitan muy generosamente, lugar al que no puedo ir!!!! Porque a pesar de que esté a punto de cumplir 19 años, no me lo merezco, no sé muy bien por qué, pero no merezco mucho de lo que tengo. Porque soy egoista, porque soy mentirosa. Sí, otra de las palabras que oigo bastante, mentirosa.
Y realmente, me lo llego a creer. Ya no sé lo que soy ni lo que no, porque no sé como me ve la gente, no sé lo que piensan de mí, ni lo que se me valora. Porque quienes quisiera que me valoraran de verdad, no lo hacen, o al menos, para nada lo demuestran. Quien sé que me valora, por mil cosas, no puedo estar siempre que quisieran, y siento que les doy la espalda, sin querer, sin intención ninguna.
Lo siento, pero no siento que le llene a mucha gente. No siento que se me necesite, no me siento más que alguien para rellanar huecos. Y es así.

No hay comentarios:

Publicar un comentario