jueves, 1 de abril de 2010

ODIO

No puedo soportarlo más. Juro que no puedo. Me estoy muriendo del asco, de la repugnancia, de la malísima ostia que llevo acumulando horas y horas. Cuanto más tiempo pasa, mayor es esta sensación que me axfisia y me deja sin aire, peor me siento, menos me siento.
Quiero gritar, chillar, llorar y sobre todo, desearía poder correr y desaparecer, soltarme de estas cuerdas que me ahogan, que me transforman y me obligan a ser lo que no quiero ser.

Soy yo la mente retorcida, ¿o son ellos que lo manipulan todo?.
Joder, si todo lo sacan de quicio, si a todo lo normal y corriente le ven los contras, si me vienen de dioses de las buenas formas, con unos humos de superioridad inaguantables... ¿cómo me mantego yo, segura de lo que pienso y de lo que quiero dejar claro, sin levantar la voz, ni siquiera milésimas?
ODIO esa forma que tienen que provocarme (sobre todo ella) para que yo salte y me puedan llover así recriminaciones de todas partes y maneras. Lo odio. Odio ese caracter, esa forma de pensar, esas pocas ganas de dejarme en paz, esa afición por arruinar cada cosa que para mí es importante, ese "porque sí" que no tiene ningún fundamento.

 Luego....
¿Por qué me siento tan mal?
¿Por qué me sientan tan mal ciertas cosas?
...

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