lunes, 7 de enero de 2013

Qué ganas que te tengo 2013...




Soy la persona más afortunada del mundo por poder decir que tengo a la mejor amiga que existe. Una persona a la que el adjetivo imprescindible se le queda pequeño. Alguien que me lo da todo con una mirada, que me lo ha dado siempre todo, desde que tengo tres años. Sin condición alguna, sin esperar nada a cambio. Sara y yo nos conocimos en 1993, en el primer curso del Parvulario. Desde entonces, fuimos juntas también a Primaria, a la ESO..., compartimos pupitre incluso en Bachiller. Estuvimos también en la misma facultad en la Universidad, y aunque ya no cursando los mismos estudios, sí nos mantuvimos en el mismo campo, la comunicación. Somos muy diferentes, pero en el fondo iguales. Tenemos distintos gustos, pero compartimos las mismas ganas. Nunca ha habido una discusión, jamás ha existido distancia, en la vida ha habido obstáculo alguno. Nada ni nadie ha sido capaz de hacer que no nos viéramos en más de una semana, ni mucho menos, de hablar en más de dos días seguidos. Ninguna circunstancia ha sido determinante para que espacio o tiempo nos alejaran, ni aunque fuera un poquito. Es casi imposible de explicar la complicidad que existe entre nosotras. Y también supongo que difícil de entender. Pero no necesito nada más que hablar con ella, para que cualquier problema, sea del tamaño que sea, deje de serlo. No hay nada que su sonrisa y sus comentarios ingeniosos no puedan calmar, ni nada que sus abrazos no puedan solucionar. Nuestra amistad es la mejor medicina absolutamente para todo, no existe un remedio más eficaz que alivie un mal día, ni un mal de amor. Esto es perfecto, y es posible. Lo nuestro da sentido a palabras como equilibrio, o fluir. Llevamos el respeto, la sinceridad y la confianza por bandera. Juntas hemos soñado muy muy alto, y juntas hemos llegado hasta aquí. Ahora, por primera vez en estos 19 años, la distancia entra a formar parte de esto. Desde hace tres días está a cientos de km, con un océano de por medio, pero... este sueño era de las dos, y así, solo cobra la mitad de sentido. Cada vez falta menos... porque esto no ha hecho mas que empezar. Coge carrerilla hermanita, que me llevas ventaja, pero enseguida te alcanzo :) Porque juntas soñamos con esta aventura british, y juntas la vamos a vivir!

Te quiero te quiero te quiero... y no puedo dejar de echarte de menos. #faltapoco!


6 comentarios:

  1. Es precioso cuando encuentras con una persona complicidad, esa confianza y compartir sueños.

    ResponderEliminar
  2. Muchas veces pienso que el amor de nuestras vidas son nuestros amigos. En la salud y en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza, siempre estarán ahí.

    ResponderEliminar
  3. Bonito blog! Yo me he creado uno recientemente, todavía soy nueva en esto, te invito a pasarte :)
    http://blairchevaliers.blogspot.com.es/

    ResponderEliminar
  4. Lindo blog, espero que te des una vuelta por el mío http://justwantfly.blogspot.com.ar/
    Buena vida :))

    ResponderEliminar
  5. ¡Pero que bonito!
    Es genial ver amistades como la vuestra, tendría que haber más así.
    Un beso, y gracias por seguirme.

    www.smileandwomanocry.blogspot.com ♥

    ResponderEliminar